La FIFA analiza una nueva ampliación del Mundial de fútbol para su edición de 2030, lo que podría llevar el número de selecciones participantes a 64, según informó el New York Times. La propuesta, realizada por un representante de Uruguay, aseguran que cuenta con el interés del presidente Gianni Infantino y podría alterar el formato de la competencia en un torneo que ya se presenta como inédito por su organización en tres continentes.
La Copa del Mundo ha experimentado diversos cambios a lo largo de su historia, pero nunca ha tenido una expansión tan rápida como en la era Infantino. Bajo su mandato, el torneo pasó de 32 a 48 equipos para la edición de 2026. Ahora, el líder de la FIFA está considerando la posibilidad de sumar 16 selecciones más para el Mundial de 2030, que tendrá sedes en Sudamérica –con los tres partidos inaugurales–, Europa y África (Argentina, Uruguay, Paraguay, Portugal, España y Marruecos).
La propuesta fue presentada en una reunión por videoconferencia, cuando el presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol, Ignacio Alonso, leyó un discurso preparado en inglés. Según fuentes con conocimiento directo de la discusión citadas por el medio estadounidense, la idea generó sorpresa entre los participantes, pero fue recibida con interés por Infantino, quien señaló que el tema merecía un análisis detallado.
El periodista Tariq Panja en el citado medio aseguró que el presidente “reconoció la propuesta y dijo que debería analizarse más de cerca”. Al mismo tiempo, se difundió que la FIFA, en un comunicado, aclaró: “La idea fue reconocida ya que la FIFA tiene el deber de analizar cualquier propuesta de uno de los miembros de su consejo”.
La posibilidad de un Mundial con 64 equipos modificaría drásticamente las fases de clasificación y podría modificar el escenario en las Eliminatorias y la organización del torneo. En Sudamérica, por ejemplo, siete de las diez selecciones ya tienen garantizado un cupo para 2026.
La posibilidad de un Mundial con 64 equipos modificaría drásticamente las fases de clasificación y podría modificar el escenario en las Eliminatorias y la organización del torneo. En Sudamérica, por ejemplo, siete de las diez selecciones ya tienen garantizado un cupo para 2026.