La Justicia allanó centros médicos, escribanías y estudios jurídicos en Santa Fe, en la ciudad y provincia de Buenos Aires en busca de información sobre 49 casos sospechosos de intermediación ilegal de recién nacidos mediante subrogación de vientre a ciudadanos extranjeros. Las mujeres que participaron eran argentinas en situación de vulnerabilidad.
La fiscal federal Alejandra Mángano y la jueza federal María Eugenia Capuchetti ordenaron los operativos, donde se incautaron documentos y actas notariales con supuestos consentimientos de las madres. Esta investigación se inició en enero tras una denuncia de la Cancillería, luego de un caso en Alemania, donde una ciudadana de 58 años llegó a un hospital con un bebé argentino en mal estado.
Se investiga un negocio ilícito de explotación del cuerpo de mujeres gestantes y la comercialización de los niños nacidos mediante subrogación. Las agencias extranjeras involucradas publicitaban el “Programa Argentina” por unos 50.000 dólares, cubriendo desde la selección de la gestante hasta el parto. Las mujeres en situación de vulnerabilidad recibían 10.000 dólares y un extra de 2.000 si era cesárea, y se les obligaba a realizar todos los intentos necesarios hasta lograr el embarazo.
Este caso forma parte de una investigación más amplia que involucra 147 legajos de gestación por sustitución, donde 49 de ellos presentan similitudes con el caso que originó la pesquisa. En esos casos, la filiación de los bebés no fue establecida por jueces civiles, sino por escribanos, con consentimientos que se presume falsos.
La fiscalía advierte que esto constituye un delito de compra venta de personas, sancionado constitucionalmente, donde se responsabiliza tanto a quienes participan en estos contratos como a los escribanos que los autorizan.