Con el estudio de impacto ambiental aprobado, el último paso que restaba, la obra del Gasoducto Metropolitano empezará a ejecutarse la semana próxima. Desde el Enerfe confirmaron que el miércoles que viene arrancan a trabajar las máquinas en El Chaquito.
La alternativa de cruce elegida por los especialistas es la que se inicia en la zona de Chaco Chico (comuna de Monte Vera) y llega hasta la defensa del sur de la ciudad de San José del Rincón. Esta traza cuenta con 3.990 metros en total, e implicará atravesar 1.850 metros del cauce de la Setúbal a 25 metros de profundidad.
«Lo que se hace a partir del miércoles es preparar el terreno para el trabajo de la máquina, con una base estable para la perforadora. Todo lo que se hace después se revierte, con la ventaja de que al ser arena es más sencillo que una costa con vegetación u otro tipo de suelo», explicaron desde el Enerfe, y agregaron que «una vez que pasa el caño se le colocan ´collarines` de hormigón a lo que quede a menos profundidad para evitar que si llegase a haber erosión en años el caño flote en una parte».
La técnica
Las metodologías constructivas analizadas fueron cuatro. Pero la que más convenció a los técnicos fue la del cruce de la laguna mediante una Perforación Horizontal Dirigida (PHD) de un solo tramo. La PHD es un procedimiento constructivo que permite colocar los conductos (del gasoducto en este caso) sin necesidad de abrir zanjas. Requiere maquinaria especial que permite un control preciso de la profundidad y trayectoria donde se debe realizar la colocación y hacer correcciones en la dirección de la perforación.
«Son 1.850 metros de PHD y el resto del valle de inundación se realiza con una zanja. La traza de ésta fue determinada por los distintos puntos ambientales, como ser bosque nativo y sitios de interés arqueológico; estamos trabajando en conjunto con el Museo Etnográfico desde hace casi 2 años», remarcaron desde Enerfe. Además, se está determinando la profundidad, «dado que hay zonas de más o menos erosión, ahí van los collarines».
